Conoce los diferentes tipos de mantequilla y el proceso de elaboración de la nuestra mantequilla de Nueva Zelanda. Adicionalmente, aprende a hacer mantequilla casera.

La mantequilla es un producto lácteo alto en grasa natural, elaborado exclusivamente con crema de la leche de vaca, y un toque de sal (en su variedad salada). Cuando la mantequilla es pura, es fabricada con un proceso muy simple y tradicional, sin aditivos añadidos.

La mantequilla para untar tampoco tiene aditivos y está hecha puramente de crema y sal. La única diferencia es que es elaborada con un proceso que le permite suavizar su consistencia, logrando mejor untabilidad. Sin embargo, algunas mantequillas para untar mezclan la pura crema de leche que aceites vegetales, logrando facilitar más aún la untabilidad (es recomendable siempre leer los ingredientes de las mantequillas para entender realmente su composición).

La pasta láctea para untar es una mezcla de crema y aceites vegetales con otros ingredientes que la hacen fácil para untar.

La margarina es una imitación de la pasta láctea para untar, hecha predominantemente de aceites vegetales y otros aditivos.

¿Sabiás que el sabor y la apariencia de nuestra mantequilla de Nueva Zelanda puede cambiar dependiendo de la temporada del año?

• Todo comienza con el sol, la tierra y el agua, los cuales se combinan de manera perfecta para darle a Nueva Zelanda campos espaciosos con pastos frescos. Gracias al clima templado, nuestras vacas andan sueltas pasteando libremente todo el año. Pero, particularmente en primavera y al principio del verano, cuando el pasto está más rico en minerales y nutrientes, la mantequilla obtiene un sabor más intenso.
• Si alguna vez has pensado qué le da a nuestra mantequilla neozelandesa su color dorado natural, es por un nutriente en particular presente en el pasto llamado betacaroteno. Entonces, en primavera y al principio del verano, la mantequilla puede ser un poco más amarilla. De hecho, nuestro pasto abundante contiene muchos nutrientes esenciales para las vacas, los cuales les ayudan a producir una leche de altísima calidad.

Se necesitan 10 litros de leche para crear 1 litro de crema, el cual resulta en 500 g. de mantequilla.

A menudo las cosas simples en la vida son las mejores. La producción de nuestra  mantequilla ANCHOR es un excelente ejemplo – es pura y natural.

Esto es lo que sucede después de que el granjero ordeña las vacas y recogemos la leche en Nueva Zelanda:

1. Separamos la crema de la leche y la pasteurizamos.
2. Luego batimos la crema para separar la grasa sólida de la leche del suero líquido.
3. Amasamos la grasa sólida de la leche hasta conseguir una textura suave y uniforme, y listo! ya tenemos nuestra mantequilla. La versión salada es el mismo proceso con un toque de sal.

La guardamos para enfriar y cuajar, y luego la empacamos y congelamos para que mantenga intacta su frescura. Una vez en tus tiendas favoritas, estará refrigerada y lista para llevarla y disfrutarla en casa.

1. Llena un frasco a la mitad con crema de leche.
2. Pon la tapa y empieza a agitarlo.
3. Cuando termine el sonido de chapoteo, saca la tapa y revisa que se esté formando crema batida.
4. Vuelve a poner la tapa y continúa agitando, hasta que la mezcla se separe en suero y mantequilla. 
5. Con un colador puedes escurrir la mantequilla (para retiarle todo el suero) y quedará lista para servir o refrigerar. El suero lo puedes utilizar para preparar otros platillos.

Algunos consejos para el mejor uso de la mantequilla

Consejos de cocción. La mantequilla es excelente para cocinar comidas a fuego medio, que no requieran altas temperaturas. Esto se debe a que el punto de humo de la mantequilla es aproximadamente 175°C (~350°F). A una temperatura más alta la mantequilla se quemará, afectando al sabor. 

Consejos de sabor. Si te gusta la manzana ácida o el pastel de caramelo un poco saladito, la mantequilla con sal puede agregar ese toque extra de una manera deliciosa.